En los últimos cuatro años Sogama posibilitó el reciclaje de cerca de 72.600 toneladas de residuos.
COMUNICADO SOGAMA
Además del Día de las Letras Gallegas, jornada de máxima exaltación de la cultura de nuestra comunidad, mañana, 17 de mayo, se celebra también el Día Internacional del Reciclaje, una efeméride con la que diversas organizaciones a nivel mundial pretenden intensificar, si cabe, la información y concienciación social en torno a las ventajas ambientales, económicas y sociales que trae consigo el reciclado de los residuos y, por tanto, la importancia trascendental que, en este sentido, tiene la colaboración ciudadana.
La separación de residuos en origen, condicionante del reciclaje
Y es que, si no hay separación previa (en el hogar, la escuela, el trabajo, tiempo de ocio, etc)de las distintas fracciones de material que conforman la basura, su posterior transformación en nuevas materias primas resultará inviable, no pudiendo alcanzarse el ansiado ahorro energético y de recursos naturales, como tampoco el económico. Porque, cuantos más desechos envíen los concellos a la industria recicladora, más ingresos recibirán por parte de los sistemas integrados de gestión y menos basura depositarán en el contenedor convencional, de cuyo tratamiento final se ocupa Sogama, posibilitando con ello una notable reducción del importe de la factura que deben pagar a esta empresa pública.
En tiempos de crisis, el máximo aprovechamiento de los productos se ha convertido en la máxima a seguir para las maltrechas economías familiares. Con el Día Internacional del Reciclaje se pretende que la correcta segregación de los desperdicios se instaure igualmente en nuestra vida cotidiana como gesto habitual del que todos, sin excepción, saldremos beneficiados.
A pesar de que únicamente dos fracciones de residuos se encuentran bajo la competencia de Sogama (bolsa amarilla –envases de plástico, latas y briks- y bolsa negra –fracción resto-), la empresa ha conseguido enviar a reciclar, durante los últimos cuatro años, cerca de 72.600 toneladas, conformadas por distintas tipologías de envases plásticos (duro, fino, pet y mixto), briks y latas que la población deposita en los contenedores amarillos y que la compañía selecciona en su planta de clasificación de forma mecánica (a través de lectores ópticos, campanas aspiradoras, electroimanes y corrientes de foucault), uniéndose a estas fracciones el acero y aluminio, separados de entre el residuo genérico.
Sogama sumará más toneladas al reciclaje con la recuperación de vidrio y acero residual
Las cantidades remitidas a la industria recicladora se incrementarán notablemente durante los próximos años, toda vez que Sogama procederá a partir de este momento a la recuperación del vidrio y acero residual (referido este último a aquél que, por su composición o tamaño, no puede ser clasificado de forma automática –electroimanes-) contenidos en la basura en masa, lo que sumará, a mayores, unas 25.000 toneladas anuales, a las que habrá que añadir la evacuación progresiva de las 170.000 toneladas de vidrio acumuladas desde el inicio de la actividad del complejo medioambiental de Cerceda en su depósito de inertes.