La Diputación gestionará la basura de Bilbao y negocia incorporar a su red el vertedero de Artigas
EL CORREO
La Diputación y el Ayuntamiento de Bilbao trabajan desde hace algunos meses en el convenio de colaboración que pondría la guinda a la gestión de los residuos de Bizkaia. A partir de 2014, el Departamento foral de Medio Ambiente pasará a encargarse directamente de la basura que se genera en la capital vizcaína por primera vez en la historia. Era la única parte de los deshechos del territorio que no dependían del Ejecutivo territorial, pero también los más numerosos: la planta TMB ubicada en el monte Arraiz recibirá a partir de ahora 100.000 toneladas anuales de residuos provenientes de la villa, 20.000 más de las que generan el resto de los municipios vizcaínos juntos.
Para ser exactos, la basura de Bilbao llega a la TMB desde el pasado mes de marzo, pero la modificación cobrará oficialidad definitivamente a partir de enero. Según el proyecto de presupuesto que ha presentado el Consistorio esta misma semana, el trasvase de la gestión costará tres millones de euros a las arcas municipales, aunque recibirá otros tres de la Diputación en contraprestación por otros acuerdos que rodean el tratamiento de la basura. Según confirmaron ayer, fuentes forales, los flecos aún se están cerrando, pero las negociaciones abordan, entre otros asuntos, el futuro del vertedero de Artigas. Es propiedad del Ayuntamiento, pero podría pasar a manos de la Diputación directamente.
El Gobierno territorial estrenó hace ocho meses la planta TMB, la “joya” que culmina su plan de tratamiento integral de la basura que se genera en Bizkaia. Hasta entonces había basureros, incineradora y centro de compostaje, pero faltaba la planta de tratamiento, que permite separar todos los deshechos domésticos que no se reciclan en las casas. El objetivo es limitar al máximo la cantidad de residuos irrecuperables antes que lleguen a las escombreras. En los años 90, nueve de cada diez kilos de basura acababan allí, pero la cantidad se ha reducido al 30% durante los últimos cursos. Otro 38% se recupera mediante la recogida selectiva y la planta de Zabalgarbi absorbe el 32% restante.
En todo caso, la Diputación puede necesitar un vertedero con relativa urgencia. Se da la circunstancia de que el próximo mes de diciembre será clausurado definitivamente el recinto de Igorre, la escombrera más grande que utiliza el Gobierno foral- hay otra en Jata (Lemoiz)-. No ha llegado al final de su vida útil, pero Medio Ambiente se ha comprometido con el Ayuntamiento a cerrarlo después de haberlo mantenido activo durante 26 años. Artigas es una buena alternativa. Tiene un tamaño mayor que el recinto de Igorre y, pese a que sus instalaciones fueron selladas hace unos años para adaptarse a las normativas europeas, el espacio disponible fue ampliado y aún podría ser utilizado
¿Podrían incinerarse residuos de Gipuzkoa en Zabalgarbi?
Las Juntas Generales abordarán el próximo lunes la posibilidad de que el Gobierno guipuzcoano pueda enviar sus residuos a la incineradora de Zabalgarbi. El responsable foral de Medio Ambiente, Iosu Madariaga, comparecerá ante las Juntas Generales, a petición del partido socialista, para explicar si el centro de valorización vizcaíno podría plantearse la posibilidad de recibir las citadas basuras ante “las necesidades” del territorio vecino. A la espera que lleguen los deshechos de Bilbao, Zabalgarbi mantiene operativa una de sus dos líneas de incineración. La segunda no ha llegado a activarla por el descenso de residuos que ha generado la crisis.