Un paso más cerca de la integración de tecnologías de captura de carbono en plantas de valorización energética

6 abril, 2021 Zabalgarbi Zabalgarbi Noticias

RETEMA

Lanzado a finales de 2020, el Fondo de Innovación de la UE es uno de los instrumentos de financiación europeos para proyectos relacionados con tecnologías pioneras en industrias intensivas en energía, energías renovables y captura, uso y almacenamiento de carbono. En total, el Fondo asignará 1000 millones de euros a proyectos a gran y pequeña escala. De 311 solicitudes para la primera convocatoria, solo 70 fueron seleccionadas para la segunda ronda.

Dos proyectos ambiciosos en el sector de conversión de residuos en energía se incluyeron en la lista de finalistas. El Fortum Oslo Varme en Noruega y el Amager Bakke en Dinamarca. Ambos proyectos planean equipar las plantas existentes con tecnologías de captura de carbono para reducir su huella de carbono. Las elecciones de la Comisión Europea para esta primera selección envían una señal positiva hacia el potencial de las tecnologías de captura de carbono en el sector de conversión de residuos en energía.

El 90% de las emisiones de CO2 se capturarán cada año

La planta de conversión de residuos en energía de Fortum Oslo Varme actualmente suministra el 60% del sistema de calefacción de distrito de Oslo mediante la quema de residuos, como residuos biológicos y hospitalarios. La nueva instalación del proyecto, integrada en la planta existente, capturará el 90% de las 400.000 toneladas de CO2 emitidas cada año. Si la financiación solicitada de 300 millones de euros se aprueba en la segunda ronda de la convocatoria, la planta estará operativa en 2026 y reducirá las emisiones de Oslo en un 15%.

Conversión de CO2 intro e-combustibles ecológicos

El proyecto de la planta de conversión de residuos en energía de Copenhague, liderado por ARC y CMP, contribuirá al objetivo de la ciudad de convertirse en la primera capital neutra en carbono del mundo. Si se selecciona la financiación solicitada por el proyecto CCS de 120 millones de euros, se eliminarán las 500.000 toneladas de CO2 emitidas cada año por la planta. El CO2 capturado también brindará nuevas oportunidades en soluciones sostenibles, como los combustibles electrónicos ecológicos para el sector del transporte.